02 noviembre, 2005

No sé nadar, pero aprenderé

Después de un fin de semana con puente bastante movidito e interesante, ayer fui al cine (que por cierto, hacía mucho que no iba) con una amiga y vi una película llamada “La vida secreta de las palabras”. Elegimos esta película por casualidad, por ir descartando muchas entre toda la basura de Hollywood y por el horario. Supongo que a todos nos ha pasado alguna vez de tener mucha ilusión en ver una película, para luego llevarnos el chasco de ver que era un bodrio. En esta ocasión, y para alegría mía, me ocurrió al revés. Creía que sería un aburrido drama ñoño, cuando en realidad se trata de un interesante film de denuncia, con contenido social. Es una película dura, como la vida misma. No crea una realidad hipócrita, falsa, ficticia, etérea e idealista de la vida, nos muestra a la vida y la sociedad tal y como es, con toda su crueldad. Denuncia la deshumanización en las guerras, la violencia en ellas contra las mujeres sobretodo. Es la historia de una mujer que ha sufrido, que ha soportado lo que los demás no podríamos soportar. Alguien que se maldice por haber sobrevivido. Y en medio de su soledad, de su triste y gris vida en la fábrica, en unas “vacaciones” conoce a un hombre herido y perdido, un hombre que ha perdido a su mejor amigo por su culpa. Y se dan cuenta que son almas gemelas. Esta es la historia de dos supervivientes. La fotografía es bellísima, la ambientación, en una plataforma petrolífera en medio del mar es perfecta. La caracterización tan humana y realista de los personajes convierten a este film, con directora catalana y a Javier Cámara en el reparto artístico, en una obra imprescindible de ver, para aquellas personas que no tienen miedo a ver el dolor de los demás, abrazan la realidad por dura que sea y están hartos de las películas de Jennifer López donde todos los personajes son de clase alta y no tienen problemas sociales (como sí los tenemos los que vemos estas películas). No le darán un Oscar, pero me emocionó poder verla.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Saludos desde Cuba en:

http://zeniaregalado.blogia.com

Le tengo un poco de lástima a esta generación de mi hija de 14 años. El mundo vende como maravillas cada basuras. Pues hay que tratar de ver lo bueno, aunque no sea lo que esté de moda.
Chaplin, un ídolo inmortal.Un abrazo.
Blogia no me ha dejado actualizar la página desde hace varios días.
¿Será otro bloqueo?.

Anónimo dijo...

Hola amigo, desde Cuba.


Ahora actualizo desde:

http://imaginados.blogia.com

Mi página anterior está fuera. Por lo pronto sigo en la neuva. Un abrazo